No queremos que nuestras calles se llenen de viviendas tapiadas. No queremos un barrio muerto.
No creemos que tapiar viviendas sea la solución final y definitiva para las demandas de seguridad de nuestras vecinas. Necesitamos pensar colectivamente cómo devolver la vida a estos espacios y alejarlos de los intereses especulativos. Apostar por la rekuperación vecinal como un elemento de cohesión y construcción de lo común.
Para ello lo primero es reconocer la extensión de estas viviendas tapiadas a lo largo del territorio vallekano.
-Viviendas tapiadas -Pisos turísticos
-Arte urbano -Inmobiliaria
-Solares Vacios -Equipamientos públicos
-Casas de juego -Centros sociales